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Imagine que usted es un joven colombiano que sueña con llegar a ser
millonario. Hoy, ¿dónde empezaría?
La
buena noticia es que hoy existen muchas más opciones para hacerse rico que en
el pasado. Por ejemplo, hace algunos años no existían profesiones relacionadas
con internet. Hoy varios jóvenes emprendedores de internet están entre los más
ricos del planeta. Cada nueva tecnología crea más y más jóvenes millonarios.
Si
fuera joven nuevamente buscaría ser el mejor en lo que mi sueño sea ser el
mejor. Muy joven, me hice empresario. No quería ser empleado de una gran
compañía. Por ello, estudié mucho sobre emprendimiento. De allí han nacido
distintas empresas como una mina de oro en China y otra de plata en América
Latina. También soy el principal accionista de una petrolera en Estados Unidos,
una firma de finca raíz y, por supuesto, The
Rich Dad Company (la Compañía del Padre Rico). Aunque no puedo decir que
soy el mejor emprendedor, soy rico por cada uno de mis negocios. Ser
emprendedor e inversionista me permite actuar en diferentes campos.
Una
pista que doy a los jóvenes es que busquen un mentor, como mi padre rico fue
para mí, y que se rodeen de amigos que crean en sus posibilidades para alcanzar
sus sueños. Hay que deshacerse de la gente negativa lo más pronto posible.
Otra
pista es que sean muy precavidos al escoger con quién se van a casar. Un marido
o una esposa que no comparta sus valores puede ser la peor catástrofe tanto
para la vida emocional como para el dinero.
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Muchos jóvenes en nuestro país se quejan con razón porque no tienen las
mismas oportunidades. ¿Cree que su experiencia hubiera sido distinta si hubiera
nacido en un país en desarrollo?
No
lo pienso. En cada país hay ganadores y perdedores. Los ganadores siempre
serán exitosos independientemente del país en que hayan nacido. Los perdedores
siempre encontrarán razones para culpar a alguien por su falta de éxito. Por
ejemplo, es común en los negocios oír frases como “mis clientes no quieren mi
producto”, “la economía está mal”, “la culpa es del gobierno” o “no puedo
encontrar gente buena para contratar”. En otras palabras, los perdedores
siempre están renegando en vez de mirarse al espejo y ver en qué pueden
mejorar.
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¿Cómo identificar una oportunidad?
Como
dije antes, hoy tenemos más opciones que nunca. El problema es que muy pocas
personas cuentan con el conocimiento, las habilidades, la experiencia y, sobre
todo, el coraje para convertir oportunidades en fortunas. De hecho, tal vez la
mejor forma para identificar una oportunidad es tratando de solucionar un
problema. Si usted sabe cómo resolver un problema, como emprendedor será una
persona muy rica. Hago énfasis en los problemas porque la mayoría de la gente
los evade, lo que significa que también evade las oportunidades.
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¿Para usted qué relación tienen el dinero y la felicidad?
Me
suelen hacer esta pregunta y me temo que no tengo una respuesta simple. Pero
analicen lo siguiente: la mayoría de la gente no ama su trabajo y por ello le
es tan difícil llegar a ser rica. Si usted quiere ser rico, “haga lo que ama”.
Por otra parte, la gente no usualmente no escoge los caminos que los llevarán a
hacer lo que aman.
Por
supuesto en este proceso también tenemos que hacer cosas que no nos gustan. Por
ejemplo, yo odiaba escribir y dar discursos. Desde el colegio me fue mal en
estos temas. Sin embargo, hoy dedico gran parte de mi tiempo a escribir y
dictar conferencias sobre temas financieros. Es decir, aprendí a hacer cosas
que no me gustan para poder hacer lo que más me apasiona, que es crear empresas e
invertir.
Pero
sobre todo, amo ganar. Más que millonario, amo ser un ganador. Como para los
atletas, ganar requiere determinación y disciplina. Mucha gente es lista y
talentosa, pero le falta el deseo y la convicción de ser ganadora. No soy un
gran escritor, pero mis libros venden millones de dólares porque soy un
ganador.
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Usted es muy controvertido en sus opiniones sobre la educación. ¿Ha
cambiado su posición frente a este tema?
El
punto clave aquí es no confundir
educación con academia. Soy el más entusiasta frente a la educación. Estoy
siempre deseoso de aprender cosas nuevas… pero no estaba hecho para ir a la
universidad. Un grado profesional es importante, si usted quiere ser doctor,
abogado o arquitecto. Pero si usted quiere ser millonario, no requiere un
título. Lo repito. Para ser inversionista o emprendedor no hay por qué pasar
por la universidad, que puede ofrecer algunos beneficios, pero no es la clave
del éxito en estos campos.
Si
lo piensas los emprendedores más exitosos en Estados Unidos no se graduaron de
ninguna universidad. Henry Ford fundador de Ford Motor Company. Thomas Edison
de General Electric, Bill Gates de Microsoft, Michael Dell de Dell Computers. Y
tampoco mi héroe Steve Jobs. Varios de estos millonarios ni siquiera terminaron
el colegio. Y mucho menos obtuvieron títulos profesionales.
Por
tanto, la educación es algo muy distinto a la academia. Amo la educación pero
no me gusta la universidad tradicional. Cada vez estudio con más determinación,
pero no lo hago para obtener un título. Estudio fuerte porque amo ganar.
Autor: Carlos Andrés Vanegas
Para la sección Management de la Revista Dinero.
Autor: Carlos Andrés Vanegas
Para la sección Management de la Revista Dinero.
EXCELENTE... TIENE TODA LA RAZON..
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